Cuantas clases de leucemia hay y cuales son

El peor tipo de leucemia

En 2021, la Sociedad Americana del Cáncer (ACS) predice que habrá 61.090 nuevos casos de leucemia, un tipo de cáncer que afecta a las primeras células del cuerpo que forman la sangre. La mayoría de las veces, la leucemia es un cáncer de los glóbulos blancos (el prefijo «leuk» significa blanco), pero también pueden verse afectadas otras células sanguíneas, como los glóbulos rojos y las plaquetas.

El segundo tipo principal de leucemia -la leucemia aguda- es de crecimiento más rápido y suele requerir un tratamiento rápido. Las personas que la padecen pueden sentirse agotadas, perder peso sin proponérselo o desarrollar fiebres aleatorias. También pueden presentar hematomas o sangrar con más facilidad de lo normal.

Sin embargo, determinar si la leucemia es crónica o aguda es sólo un paso en el proceso de diagnóstico. Dentro de cada uno de estos amplios grupos hay varios subtipos, y recibir el diagnóstico de un tipo correcto y específico de leucemia es clave para recibir la atención adecuada. A continuación, se describen los cuatro tipos principales de leucemia, así como algunos tipos raros que deben tenerse en cuenta.

Hay cuatro tipos de leucemia que se diagnostican con mayor frecuencia. Cada uno de ellos es agudo o crónico y afecta a un tipo específico de células. Son: la leucemia linfocítica aguda (LLA), la leucemia mieloide aguda (LMA), la leucemia linfocítica crónica (LLC) y la leucemia mieloide crónica (LMC). Esto es lo que hay que saber sobre cada tipo.

Tipos de leucemia en niños

En la LMC, se produce un cambio genético en una versión temprana (inmadura) de las células mieloides, las células que producen los glóbulos rojos, las plaquetas y la mayoría de los tipos de glóbulos blancos (excepto los linfocitos). Este cambio forma un gen anormal denominado BCR-ABL, que convierte la célula en una célula de LMC. Las células leucémicas crecen y se dividen, acumulándose en la médula ósea y pasando a la sangre. Con el tiempo, las células también pueden instalarse en otras partes del cuerpo, incluido el bazo. La LMC es una leucemia de crecimiento bastante lento, pero puede convertirse en una leucemia aguda de crecimiento rápido y difícil de tratar.

En la leucemia crónica, las células maduran parcialmente pero no completamente. Estas células pueden parecer bastante normales, pero no lo son. Por lo general, no combaten las infecciones tan bien como los glóbulos blancos normales. Las células leucémicas también viven más tiempo que las normales, se acumulan y desplazan a las células normales de la médula ósea. Las leucemias crónicas pueden durar mucho tiempo antes de causar problemas, y la mayoría de las personas pueden vivir muchos años. Pero las leucemias crónicas suelen ser más difíciles de curar que las agudas.

Cuáles son los 4 tipos de leucemia

La leucemia suele afectar a los glóbulos blancos. Los glóbulos blancos son potentes combatientes de las infecciones: normalmente crecen y se dividen de forma ordenada, según las necesidades del organismo. Pero en las personas con leucemia, la médula ósea produce una cantidad excesiva de glóbulos blancos anormales, que no funcionan correctamente.

El sistema linfático forma parte del sistema inmunitario del cuerpo, que protege contra las infecciones y las enfermedades. El sistema linfático incluye el bazo, el timo, los ganglios y los canales linfáticos, así como las amígdalas y las adenoides.

Cómo se forma la leucemiaEn general, se cree que la leucemia se produce cuando algunas células sanguíneas adquieren cambios (mutaciones) en su material genético o ADN. El ADN de una célula contiene las instrucciones que le indican a la célula lo que debe hacer. Normalmente, el ADN le dice a la célula que crezca a un ritmo determinado y que muera en un momento determinado. En la leucemia, las mutaciones indican a las células sanguíneas que sigan creciendo y dividiéndose.

Cuando esto ocurre, la producción de células sanguíneas se descontrola. Con el tiempo, estas células anómalas pueden desplazar a las células sanguíneas sanas de la médula ósea, lo que hace que haya menos glóbulos blancos, rojos y plaquetas sanas, y provoca los signos y síntomas de la leucemia.

El mejor tipo de leucemia que se puede tener

La leucemia linfocítica aguda, también llamada linfoblástica o linfoide, representa alrededor del 75% de las leucemias infantiles. En esta forma de la enfermedad, se ve afectada la línea celular de los linfocitos. Los linfocitos combaten normalmente las infecciones. En la leucemia linfocítica aguda, la médula ósea produce demasiados linfocitos y éstos no maduran correctamente. Los linfocitos producen en exceso, desplazando así a otras células sanguíneas. Las células sanguíneas inmaduras (blastos) no funcionan correctamente para combatir las infecciones. La leucemia aguda puede producirse en un corto período de días a semanas. Las anomalías cromosómicas (cromosomas adicionales y cambios estructurales en el material cromosómico) están presentes en la mayoría de los pacientes con LLA.

La leucemia mielógena aguda, también llamada granulocítica, mielocítica, mieloblástica o mieloide, representa aproximadamente el 19% de las leucemias infantiles. La leucemia mielógena aguda es un cáncer de la sangre en el que se producen demasiados granulocitos, un tipo de glóbulo blanco, en la médula. Los granulocitos normalmente combaten las infecciones. En la leucemia mielógena aguda, la médula ósea produce demasiados granulocitos y éstos no maduran correctamente. Los granulocitos se producen en exceso, desplazando a otras células sanguíneas. Las células sanguíneas inmaduras (blastos) no funcionan correctamente para combatir las infecciones. La leucemia aguda puede aparecer en un periodo corto de días a semanas. Los niños con determinados síndromes genéticos, como la anemia de Fanconi, el síndrome de Bloom, el síndrome de Kostmann y el síndrome de Down, tienen un mayor riesgo de desarrollar LMA que otros niños.